
Es muy común que tu niño se rehúse a comer brócoli, bien sea por su sabor algo fuerte o por su color, además, si no ofreciste este vegetal a temprana edad te resultará complejo incorporarlo después. Una manera fácil de hacerlo es prepararlo en croquetas ya que esconden el color verde y el sabor varía por lo que les gustará a tus niños.
Ingredientes:

- 1 brócoli grande
- 1 huevo
- Harina de trigo (1 o 2 tazas)
- Queso blanco rallado
- Aceite
Preparación:

Corta el brócoli por tallos y ponlo a cocinar en una olla de agua. Cuando este blando, sácalo y espera que enfríe, corta los tallos en pequeños trozos. En un bol, vierte los trozos de brócoli, echa el huevo y revuelve, ahora, echa las tazas de harina poco a poco hasta lograr una masa consistente poco pegajosa (no necesariamente usarás las dos tazas de harina, puede ser menos, esto dependerá del tamaño del vegetal).
Echa el queso a tu gusto y un poco de sal. En un caldero, pon a calentar el aceite y cuando esté bien caliente echa la mezcla como si fueran panquecas. Saldrán varias croquetas que tendrán una consistencia suave, ideal para tus niños.
Ideas para los pequeños
Ponlos a lavar el vegetal con agua y jabón antes de cortarlo, como es blando, pueden picar los tallos con la mano y ponerlos en la olla antes de hervir, también, pueden ayudarte a preparar la mezcla con las manos. Tú echa los ingredientes y deja que ellos amasen, será muy divertido además estarás estimulando el desarrollo óculo-manual (ojo-mano) y el seguimiento de instrucciones ¡No esperes más y haz de la cocina un arte!